Renuncia al catolicismo

 

En la columna de hoy del editorialista Walter Spurrier que lleva como título ¿El fin de lacristiandad? Vemos que comete dos errores fundamentales, el primero es sin duda el poner a la religión católica apostólica y romana como única heredera del cristianismo. También, y gracias a las posturas de la filósofa francesa Chantal Delsol, que el cristianismo es antagónico a los movimientos como el feminismo y el ecologismo.

Si bien es verdad que es innegable la perdida de fieles católicos, mayormente en países europeos, ya que en Latinoamérica es todavía fuerte la religión. Tenemos que ver que ha existido un crecimiento de otras posturas a un más conservadoras del cristianismo, pues ciertas iglesias evangélicas e incluso la iglesia de los santos de los últimos días han tenido un repunte de adeptos. Esto se debe a la gran división que varios de los gobiernos populistas han creado en estas sociedades latinoamericanas, la división social radical. Otro de los factores de esta división se observa en las redes sociales y como la opinión templada no es tolerada, pues las posturas dicotómicas que se presentan solo aceptan opciones absolutas.

También debemos tomar en cuenta que el cristianismo es una religión que poco a cambiado en mas de dos milenios, todavía nos piden condiciones que ya superamos en el renacimiento. La pobreza, la resignación y el poner la otra mejilla eran elementos del discurso católico que se usaban para mantener el status quo de las elites que gobernaban y del clero que cogobernaba con ellos.

En la actualidad el sobrevivir no basta, la vida debe ser digna, no solo lo dicen las feministas y los grupos minoritarios, sino que lo dice la Declaración Universal De Los Derechos Humanos. Entonces me hago la pregunta, ¿Qué clase de vida se defiende? ¿Cómo garantizamos la vida digna de un bebe luego de su nacimiento? Esa es la real empatía que se busca y desde mi lectura de los evangelios conozco a un cristo que siempre busco la comprensión y el bienestar de los desprotegidos, jamás imponiendo su pensamiento, sino apoyando y empatizando.

Esta pérdida de fe como dice Spurrier se debe a la hipocresía de los practicantes del cristianismo y de los crímenes cometidos por los sacerdotes que deberían ser ejemplares, pero se vuelven, en algunos casos, en servidores de dogmas caducos y esparcidores de odios y miedos infundados. Conozco el caso de un sacerdote que, violando el secreto de confesión, reveló la orientación sexual de un adolescente a sus padres ultraconservadores; eso es uno de los mayores pecados que puede cometer un clérigo.

Entonces no es de extrañar que las personas poco a poco abandonen el catolicismo en busca de algo diferente, por un lado, los más conservadores busque reglas más claras, menos ambiguas y que representen de mejor manera un dogma divino rígido. Por el otro lado aquellos que buscan el bienestar general de todos, que, siguiendo un sentido de la real empatía, no solo con el congénere, sino con todo lo que le rodea se alejan de esta visión del Dios rey y su creación centro del universo para ser parte de un todo más poderoso. Si personalmente, me preguntan en que creo, yo les diría, que la fuerza este con ustedes, siempre.

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